Esta fotografía está tomada el pasado viernes 12, al mediodía, aguas abajo de Aldea del Fresno, en la Comunidad de Madrid. Es el río Alberche, ejerciendo de río, con caudal, sonido y hechuras de río. Todo esto es posible gracias a los regantes del Canal Bajo del Alberche, y en menor medida al abastecimiento de Talavera de la Reina. ¿Por qué? Porque si no hubiera demandas aguas abajo del embalse de Picadas, toda el agua que circula ahora por el Alberche se iría bombeada al embalse de Valmayor, sobre el Guadarrama, y de ahí a las potabilizadoras y tuberías del Canal de Isabel II.
Pero al existir regadíos en Talavera, se garantiza un régimen de caudales importante durante todo el verano en el Alberche, entre Picadas y Cazalegas. Si no existieran estas demandas, el río estaría seco, o reducido a un hilo de poco más de medio metro de ancho, con las aguas residuales de los pueblos y urbanizaciones que jalonan el curso medio y bajo del Alberche, tal como ocurrió en el verano de 2006.
Pero al existir regadíos en Talavera, se garantiza un régimen de caudales importante durante todo el verano en el Alberche, entre Picadas y Cazalegas. Si no existieran estas demandas, el río estaría seco, o reducido a un hilo de poco más de medio metro de ancho, con las aguas residuales de los pueblos y urbanizaciones que jalonan el curso medio y bajo del Alberche, tal como ocurrió en el verano de 2006.
Es importante saber de qué se habla, y no demonizar a los regantes ni a los regadíos. De momento sirva esta imagen, que sólo es posible, repito, gracias a los regantes del Canal Bajo del Alberche de Talavera.
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