HOMENAJE AL RÍO TAJO

Hoy se ha celebrado en Talavera de la Reina el III Homenaje al Tajo. En el paraje de Los Sifones, retazo de bosque de ribera superviviente junto a la ciudad en su margen izquierda, nos hemos reunido para pasar un día junto al Tajo, a la sombra de los álamos y los tarays. Día de sol y calor, con el verde nuevo de las alamedas llenando el bosque. A mediodía han llegado los piragüistas del club Talak, descendiendo el Tajo desde el Soto de Entrambosríos. Día de reivindicación y de fiesta, porque el Tajo en Talavera de la Reina, la mayor ciudad de España a orilla del Tajo, se ha convertido en una cuestión de principios, porque ya son muchos años de ver pasar un río como un espectro maloliente. El Tajo tiene que volver, pero esta vez para quedarse.

En estos tiempos en lo que el Tajo se trocea, se reparte, se vende al mejor postor o al que más ruido hace, queda claro que los ciudadanos que homenajean a su río son los que le quieren, los que le necesitan para vivir junto a él. Pese a cerca de 40 años de abandono, el Tajo aún sobrevive en el recuerdo de quienes lo conocieron, de quienes se bañaron en él, o de quienes pasaron una tarde de primavera a la sombra de sus sotos. El Tajo es posible a poco que se le limpien las aguas y que se cierre el grifo del trasvase al Segura. Quizá ya quede menos para que el Tajo vuelva a fluir por su cauce. Quizá la primavera que viene.